Si el trabajo remoto ya era tendencia antes de la pandemia, este año hemos experimentado un incremento nunca antes visto de oficinas y consultorios en casa. Obviamente, esto viene de la mano de inquietudes estéticas y decorativas para adaptar espacios de trabajo armónicos, ergonómicos y donde nos resulte grato pasar ocho o más horas al día. 

 

Si eres de los muchos profesionistas que está pensando en un proyecto de decoración serio para su oficina en casa, no te puedes perder estos consejos. Hoy te explicaremos qué tipo de colores te conviene más utilizar de acuerdo con tu profesión, para conseguir un ambiente productivo y con una gran personalidad. 

 

La regla de los tres colores 

La psicología del color ha comprobado que diferentes colores evocan distintas sensaciones y estados de ánimo. Independientemente de a qué te dediques, tu espacio de trabajo siempre debe ser un sitio que promueva la concentración y la energía positiva.

 

Ahora bien, uno de los errores de decoración más comunes entre quienes no se dedican a esto, es utilizar un solo color de manera predominante. De hecho, en lugar de pensar en “un color para pintar” debes más bien de pensar en una combinación de tres tonos que se complementen entre sí. La proporción ideal es la siguiente:

 

  • 60% de un color neutro 
  • 30% de un color brillante en la misma gama que el neutro
  • 10% de un color de contraste

 

Por ejemplo, puedes pintar la habitación de un gris claro, dejar un muro en color turquesa y aprovechar los muebles para integrar un contraste visual en blanco, negro o maderas. Otra idea puede ser pintar las paredes de un blanco hueso, la pared del fondo de un color salmón vibrante y dejar los acentos en madera clara. 

 

1.- Colores neutros: Ideales para profesiones relacionadas con la salud

Si te dedicas a cualquier profesión relacionada con la salud, es muy probable que recibas pacientes en tu oficina o consultorio, y si lo que quieres es transmitirles confianza y tranquilidad, tu mejor apuesta es combinar colores neutros y claros. 

 

El color blannco en particular ayuda a la luminosidad y genera una sensación de orden, amplitud e higiene. Mientras más neutras sean las paredes más puedes jugar con los colores y texturas de los objetos decorativos y el mobiliario. 

 

2.- Colores cálidos: perfectos para profesiones creativas

Decoradores, diseñadores, escritores, músicos y creativos en general se benefician mucho con los ambientes en colores cálidos, ya que estos fomentan un estado de ánimo relajante y acogedor que deja fluir la inspiración. 

 

Los colores cálidos van perfectamente con revestimientos como la madera y el ladrillo. Recuerda que si vas a utilizar rojos, naranjas o amarillos brillantes, es mejor dejarlos como color secundario y no principal, porque pueden saturar la vista.

 

3.- Colores brillantes: marketing y el mundo de la belleza

Si tu giro tiene que ver con nichos tan dinámicos y versátiles como el mundo de la publicidad, la moda o el las relaciones públicas, puedes aventurarte con ambientes más vibrantes y cargados de color, pero recuerda que las paredes de colores brillantes u oscuros van mejor con mobiliario neutro y acentos de contraste. 

 

4.- Colores fríos: profesiones analíticas y tecnológicas

Quienes se dedican a trabajar con datos, información sensible y tecnologías de punta, pueden beneficiarse mucho de los colores fríos dado que promueven la tranquilidad y la concentración en tareas de alta exigencia. El gis gris y los  acabados tipo concreto en particular crean una atmósfera elegante y moderna.

 

Ya que tengas clara tu paleta de colores, no olvides que siempre es buena idea combinar texturas, recubrimientos y acabados distintos, así como buscar el mobiliario más ergonómico posible y, claro, cuidar mucho la iluminación. 

 

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