El muro que da soporte al lavabo y/o la estufa en la cocina es una de las zonas más propensas a ensuciarse, por ello es fundamental que tenga un recubrimiento fácil de limpiar y prácticamente imposible de percudir. Esto también aplica para la salpicadera del baño. El azulejo moderno diseñado para salpicaderas no solo protege tus muros, también te da la oportunidad de convertir un espacio sencillo en toda una experiencia.

En ocasiones, también cuenta con un modo de instalación “hágalo usted mismo” en el que sencillamente hay que quitar la cubierta protectora de la parte trasera y pegarlo al muro

A continuación te damos instrucciones paso a paso para instalar mosaico o azulejo en la salpicadera de tu estufa o lavabo.

Medición y grabado

1.- El primer paso para instalar mosaico en una salpicadera es tomar medidas precisas del muro entre la barra y la base de los gabinetes, o el techo, según sea el caso. Esto incluye el largo y el ancho del espacio disponible en la pared. Es preferible usar una regla o un metro rígido que una cinta flexible para mayo precisión.

2.- Una vez que tengas las medidas, procede a calcular el área a cubrir y asegúrate de que tienes suficientes hojas de mosaico y de mortero. Recuerda utilizar el mortero especial para el tipo de azulejo que estás instalando. 

3.- Utiliza cinta o masking tape para cubrir los bordes de la encimera y la línea inferior de los gabinetes colgantes, o en su caso el borde del techo, si es que tu mosaico llegará hasta arriba. Esto es muy importante pues el mortero puede llegar a dañar acabados como la madera, el mármol o el granito. 

4.- Cubre perfectamente con cinta enchufes y otros elementos en la pared que vayan a quedar en medio del mosaico.

Preparando el área del muro

5.- Asegúrate de que no haya agujeros o bultos en el muro, o cualquier acabado propenso a desprenderse (como el yeso). De ser necesario, resana y/o lima protuberancias. 

6.- Limpia el muro con un paño húmedo primero, y si hace falta utiliza algún producto de limpieza. Enjuaga y seca perfectamente. No debe haber residuos químicos ni suciedad en el muro cuando comiences a instalar tus mosaicos.

Preparando el espacio de trabajo

7.- Quita todos los objetos y utensilios de la encimera, cualquier cosa que pueda ensuciarse o dañarse durante la instalación del mosaico.

8.- Si es necesario, desconecta y mueve la estufa y/o el microondas

9.- Coloca una cubierta protectora de plástico sobre la encimera vacía y el lavabo y asegúrala con cinta adhesiva.

Presentando el mosaico

10.- Toma las hojas de mosaico y colócalas en las áreas demarcadas para asegurarte de que queden bien. Corta los mosaicos de las esquinas para que queden del tamaño exacto. Recuerda utilizar la herramienta adecuada de corte dependiendo del tipo de azulejo que estés usando. 

Preparando y aplicando el mortero

11.- Algunos mosaicos para salpicadera vienen listos para instalar y solo hay que remover la capa protectora de la parte trasera y pegarlos directo al muro. Sin embargo, muchas personas prefieren el mosaico tradicional e incluso mosaico de cemento con mortero por su mayor durabilidad. 

12.- Prepara el mortero siguiendo cuidadosamente las instrucciones, en un recipiente o cubeta lo bastante amplio como para manipular la preparación con facilidad.

13.- Aplica la preparación en el muro utilizando una espátula llana con muesca en forma de “v”, ya que es tu herramienta ideal para maniobrar el material en zig zag en espacios pequeños. Cubre toda la pared o área de instalación del azulejo.

Colocando el mosaico

14.- Coloca cuidadosamente cada mosaico u hoja de azulejo, asegurándote de que sus bordes se alineen perfectamente con todas las esquinas. Es muy importante que quede bien desde el inicio porque luego no podrás rehacerlo.

15.- Realiza los pequeños ajustes que sean necesarios y deja secar durante 24 horas.

Dando los toques finales

16.- Una vez que ha fraguado el mortero, limpia y seca perfectamente los azulejos.

17.- Prepara la lechada de acuerdo con las instrucciones del producto, y aplícala en los bordes un lechador de goma. Remueve todo el excedente con una espátula. 

18.- Limpia los excedentes con un trapo húmedo y deja secar otras 24 horas.

19.- Aplica el sellador mate o brilloso de tu preferencia (sólo para instalación de mosaicos de cemento).

20.- ¡Disfruta tu nueva salpicadera!

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