¿Acabas de mudarte y tu nuevo hogar tiene una cocina demasiado chica? No te preocupes, aunque sea un lugar minúsculo siempre puedes aprovecharlo al máximo tanto en espacio como en estética, con algunos trucos útiles como los que te compartiremos hoy.
No necesitas hacer grandes remodelaciones ni realizar un gasto super fuerte, especialmente si se trata de una vivienda rentada. Simplemente dejar salir la creatividad y pensar fuera de la caja. ¡Empecemos!
1.- Analiza si puedes sacar el refrigerador o la despensa
Muchas veces el mayor problema con una cocina pequeña es que es imposible guardar todos los sartenes, ollas, platos y demás accesorios en el espacio disponible, pero si el área en la sala o el comedor es aceptable, puedes dejar el refrigerador afuera y aprovechar el hueco que deja libre para poner anaqueles o gabinetes.
Lo mismo ocurre con la despensa, o sea, el espacio donde guardamos cosas como los cereales, las latas y los frascos de alimentos. Puedes conseguir un anaquel desmontable con ruedas y colocarlo afuera de la cocina en el área del comedor, o aprovechar otro mueble con sitio para guardar.
2.- Cuelga tus accesorios para aprovechar el espacio en los muros
Con un poco de creatividad nos damos cuenta de que quizá hay mucho espacio que realmente no estamos aprovechando, especialmente en los muros y en las paredes. Basta con instalar tubos metálicos con ganchos para colgar todas las ollas y los sartenes, y muchos de los implementos de cocina. Si te fijas, casi todos tienen un hueco en el mango o las agarraderas precisamente para eso.
3.- Almacena todo en recipientes cuadrados
Los azulejos de mármol rectangulares son muy populares últimamente entre los baños de diseño. Son clásicos, duraderos, versátiles y, lo más importante, asequibles. Una pared blanca con patrón de unión repetitivo se presta a una gran variedad de estilos. Los tonos grises claros se complementan excepcionalmente con mobiliario blanco, gris o negro.
4.- Utiliza colores claros y espejos
Para crear la sensación de una cocina más amplia y luminosa, evita siempre que puedas los colores oscuros. Lo más recomendable es que mantengas los muros y los gabinetes en colores claros. Si quieres darle un toque de color, pinta de un tono brillante la pared del fondo para crear la sensación óptida de profundidad. También puedes decorar la salpicadera con mosaico de cemento de varios diseños coloridos. Otra buena recomendación es que coloques un espejo lo más grande posible en algún espacio vacío de la pared. También puedes poner varios espejos pequeños a modo de decoración. Esto inmediatamente crea la ilusión de una cocina más grande.
5.- Compra un lavabo con fondo profundo
Normalmente desperdiciamos bastante el espacio que hay en los gabinetes debajo del lavabo, porque nunca lo ocupamos hasta arriba. Por eso, conviene invertir en un lavabo lo más profundo posible, porque así los trastes y las ollas sucias no se acumularán en todas las superficies de nuestra pequeña cocina.
Adicionalmente, un grifo de agua con manguera o extensión flexible puede hacer toda la diferencia en lo que respecta a la comodidad de lavar trastes en un espacio muy reducido. Un tip extra que puede serte de gran ayuda es colocar un escurridor elevado directo sobre la tarja.
Recuerda que, sin importar el tamaño de tu cocina, aprovechar los mosaicos de cemento para la salpicaderas, los muros y toda clase de superficies es una excelente opción, ya que se trata de un acabado resistente que dura prácticamente toda la vida, y que se mira como nuevo una y otra vez con el mantenimiento adecuado.
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